viernes, 5 de junio de 2015

Pequeña historia de la Venta Lanada, Montes de Málaga

   Salida 241                  Distancia: 34,41 km / Duración: 2,30 h  / Desnivel Acumulado: 799 m    

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    Hoy hemos recorrido la parte más alta del parque natural. Para ahorrar tiempo hemos subido en coche hasta la venta El Detalle desde donde hemos comenzado a subir por la carretera de los montes, la A-7000. A algo más de kilómetro y medio desde la venta está el comienzo de la pista que lleva al Mirador del Cochino y la cual tomamos para dirigirnos al mirador  Mirador Francisco Vázquez Sell por la pista "de los toboganes". Del mirador nos dirigimos al cruce de caminos para ir al  Aula de Naturaleza Las Contadoras y en dicho cruce tomamos la pista hacia el Mirador Martínez -Falero. Superado el mirador, seguimos la marcha por la pista que pasa cerca del  Lagar de Santillana y continúa hacia el Lagar de Chinchilla. Superada la zona de esta vieja construcción, hoy en ruinas, se toma una pista que se adentra en la cañada del Arroyo de Gutierrez y que va hacia el paraje llamado El Dorador


Ruta en el ámbito del parque natural


    Esta zona, que es una especie de circo formado por las cañadas de dicho arroyo y otro menor que desemboca en él, la recorre la pista por su arco superior donde se encuentra una encrucijada señalada por un monolito. 


Monolito de orientación de El Dorador



    Desde este punto hay una magnífica vista de las cañadas y de la parte sur del parque. Hay aquí también una pequeña casita al borde de la pista.



Zona del monolito de El Dorador mirando hacia el sureste


    Detrás del monolito parte una camino que es el que tomamos para continuar hacia el norte. Esta comienza compartiendo unos 400 metros de trazado con un cortafuegos.


Zona de inicio del la pista hacia el norte



    Esta parte del parque sigue estando dominada por extensos pinares. Pero parece tener un aspecto distinto, como más salvaje y aparecen entre ellos más tipos de árboles que no son tan abundantes en la parte sur del parque. Desde su inicio en el monolito, durante unos dos kilómetros y medio, la pista va bordeando los ramales occidentales que parten de otro mayor de orientación norte -sur. Al alcanzar el extremo norte de este ramal principal la pista gira hacia el este y sigue bordeando pequeños pechos y cañadas, estas ahora orientadas hacia el norte.



Curva donde se gira hacia el este y primeras vistas de la Sierra de Camarolos al fondo


    Desde estos tramos de la pista se tiene una espectacular panorámica del corredor de Periana. Este gran eje une la Axarquía con los Montes de Málaga y en él se encuentran los pueblos de Colmenar y Riogordo, y por donde discurren los primeros tramos del río Guadalmedina y los arroyos que lo nutren de sus aguas. Al fondo se contempla la Sierra de Camarolos cuyo primer pico que puede verse desde este camino es el Cerro de la Cruz de  1427 metros de altitud.



Al fondo de la imagen el Cerro de la Cruz en el extremo occidental de la Sierra de Camarolos



    La pista es muy sinuosa pues va discurriendo entre las cañadas de los ramales de esta parte de los montes. Aunque por estas zonas sigue siendo el pinar el que domina la masa forestal, son más abundantes que en las zonas más al sur del parque las encinas, algarrobos y algunos alcornoques. También hemos vistos algunas grupos de eucaliptos.



Aspecto de la pista por esta zona


    Un ejemplo de lo anterior es este magnífico ejemplar de alcornoque que encontramos al borde del camino, cuya altura debe superar los 10 metros de altura y su ancha copa cubre para del camino.




Perfil del alcornoque desde el camino


    El corcho ha sido recogido de sus tronco principal y bajo su copa se disfruta de una buena sombra que se agradece en un día como hoy.



Vista de la copa del alcornoque desde abajo.

    


    Desde cualquier parte de la camino en que los árboles permiten ver el paisaje se tiene una panorámica de la Sierra de Camarolos. Desde este punto en que hacemos una pequeña parada se puede ver la parte de la Sierra del Jobo donde se encuentra el pico Chamizo de 1641 metros de cota.



Panorámica de la Sierra de Camarolos con el Pico Chamizo a la derecha 



    Más adelante llegamos al encuentro con la carretera donde se encuentra la Venta El Pinar. Tomamos ahora la carrera a Colmenar, la A-7000, en dirección a Málaga. En el kilómetro 10, en un curva cerrada que rodea un cerro en una zona que se llama Molino de Viento nos detenernos para hacer una pequeña visita a un bonito caserón que me llama la atención, es la Venta Lanada.



Fachada de la Venta Lanada


    En esta brillante fachada que refleja la luz del mediodía como si fuera un espejo, luce una placa de mármol encima de la ventana donde podemos leer: “Venta Lanada construida por Miguel Aguilar López año 1.924”. Parece ser que este hombre, pobre y sin recursos, empezando con el poco dinero obtenido de la venta de una arroba de vino que un amigo le regaló, fue haciendo negocios hasta poder adquirir una antigua casa en el camino a Colmenar. Miguel la reformó en una venta, es decir, en una tienda donde se vendían todo tipo de cosas subidas desde la capital (se encuentra a más de 900 m de altitud) a los habitantes de los innumerables lagares y cortijos de la zona. Como por aquel entonces esta era la única carretera para salir de Málaga hacia el norte, la venta era lugar muy frecuentado por viajantes y diariamente la familia de Miguel tenían gente para comer, lo que hizo que terminara como lugar para comer en el camino. Durante las obras de reforma para convertirla en venta, los obreros contratados no rendían todo lo que debían hacerlo, por lo que Miguel les recriminaba su actitud (se entiende que cobraban por jornada) y les decía que aquello era un abuso, porque él era pobre y que no tenía Nada. De esta graciosa historia sale el nombre de esta histórica venta, que durante casi un siglo ha servido al viajero, platos tradicionales de esta zona malagueña como el humilde plato de los Montes o las migas siempre con un buen vino dulce.


    Seguimos el camino para concluir donde lo comenzamos, en otra de las ventas que jalonan esta vieja carretera. Ya, sin necesidad de seguir pedaleando, concluimos la salida con algo, también, tan típico de los montes como los los lagares, los cerros o los pinares: un buen plato de lomo en manteca que acompañado con una cerveza fría y una buena charla culminan una gozosa mañana de bicicleta.






Fuentes consultadas:

 ●  Centro Nacional de Información Geográfica
 ●  Blog Mi cachito de Málaga 


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Bokerón Montaraz


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